Desplaza hacia abajo y actualiza el feed de la retroalimentación.
Dafne Navarro / Knowledge Management / Great Place to Work® México
Casi todos sabemos la importancia que tiene la comunicación entre las personas, aun así, solemos comunicarnos en modo automático, a veces sin percibir lo que estamos diciendo, o lo que es aún más grave sin dar atención a lo que estamos escuchando.
Porque, seguro te ha pasado que en más de una ocasión te preguntaste: ¿Qué me estaba diciendo Juan? Quizá en una situación personal esto podría ser tomado a la ligera, pero cuando hablamos de comunicarnos en el entorno laboral entonces el tema se torna serio e incluso riesgoso.
Coincidirás conmigo en que a casi nadie le gusta que se de un incumplimiento porque algo no se entendió o más grave aún, no fue escuchado o retroalimentado.
Cuando alcanzamos un nivel efectivo de comunicación, es entonces que además de expresar y escuchar agregamos la retroalimentación, o como decía un Desarrollador Humano, “entregamos el acuse de recibido”.
Desde el enfoque del Proceso Administrativo se nos dice que la retroalimentación ocurrirá una vez que se tengan resultados de medición y la corrección de desviaciones, y si bien esto puede ser aplicado en múltiples procesos en la gestión humana, esto ya viene con un gran retraso. La tendencia está rompiendo con esta forma tradicional.
Hoy los líderes y colaboradores están demandando que la retroalimentación sea tan simple como cuando en su teléfono celular deslizan su dedo hacia abajo y en el instante se actualiza el feed de su Twitter. ¡Dame noticias al instante!
Afortunadamente tenemos la revolución digital de nuestro lado, y las nuevas plataformas para la gestión de recursos humanos proveen información suficiente sobre la productividad, la ocupación de tiempo en la oficina, índice de desempeño, nivel de satisfacción, compromiso e incluso la confianza que los colaboradores tienen con la organización.
Esta información objetiva es fundamental para tomar decisiones, pero no podemos despersonalizar el trato con nuestros colaboradores.
Es importante entonces pensar estrategias que permitan a la cultura pasar a una retroalimentación al instante, un sistema de comunicación bidireccional que permita detectar y solucionar problemas en el momento.
¿Y qué beneficios tendría? Es importante identificar tres: corregir comportamientos en el momento en el que se han producido y no meses después, hacer sentir a tus colaboradores más valorados e importantes dentro de la empresa, y una mayor vinculación y compromiso.
Así lo demuestra el estudio de Ambiente Laboral de Great Place to Work® en México, donde 8 de cada 10 colaboradores que laboran en las organizaciones de 500 a 5,000 se sienten satisfechos en la forma que sus líderes se comunican y los escuchan
Lo anterior contrasta con el hecho de que los indicadores de compromiso alcanzaron un 87% y que un 86% de las personas se sienten valoradas, pues perciben que su participación hace una diferencia en la organización.
Otro estudio realizado por la consultora estadounidense Eagle Hill Consulting demuestra que el 87% de los empleados cree que la retroalimentación es importante para su desarrollo profesional y que, de hecho, el 85% se siente más valorado cuando se la dan.
Sabemos que retroalimentar traerá beneficios, entonces apliquemos cinco acciones que ya se llevan a cabo en algunos de los Mejores Lugares para TrabajarTM y que irán transformando la cultura de retroalimentación:
Ofrecerla constantemente: Establece un seguimiento periódico acompañado de un plan de acción.
Intenta hacerlo cara a cara: Charlas en persona, cercanas y amigables. La apertura crea el ambiente idóneo para fomentar un diálogo.
Reconoce los logros: Si se empiezan a hacer las cosas de manera distinta y dan resultados, hazles sentir que su esfuerzo es valorado.
Más allá del líder: Integra a otros colaboradores o clientes a participar en ella, esto fortalece la confianza y ampliará el alcance para conocer las áreas de mejora.
Dar y recibir constructivamente: Dedicar tiempo a la formación de los colaboradores para que asuman que la retroalimentación es un proceso al que no deben temer.
Al igual que Los Mejores Lugares para Trabajar™ es importante apostar por la retroalimentación al instante, pues como bien decía el experto en management Ken Blanchard, “es el desayuno de los campeones” y como decía mi madre, “el desayuno es el alimento más importante del día”. Así que empecemos a darle swipe a la pantalla y pongamos al día a nuestros colaboradores.